“La reforma fiscal de Chile no tendrá impacto en la inversión extranjera”

Alberto Arenas, ministro de Hacienda en el Gobierno de Michelle Bachelet, llega a Madrid en una visita relámpago de apenas nueve horas. Lo justo para reunirse con el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, y explicar a los inversores y empresarios españoles la reforma tributaria recién aprobada por el Congreso chileno. Una labor de pedagogía que busca revertir el rechazo de la clase empresarial a una reforma que aumentará en siete puntos la carga fiscal sobre las empresas.

– Llega a Madrid procedente de la City de Londres. ¿Qué sensaciones le han trasmitido los inversores y empresarios europeos?

Entre los inversionistas había mucho interés por conocer las claves programáticas de la administración de la presidenta Bachelet y de sus reformas estructurales, entre ellas la tributaria. En general percibí muestras de confianza en lo que estamos haciendo, ofrecimientos de colaboración e interés por seguir invirtiendo en Chile.

–La reforma tributaria no ha gustado a los empresarios chilenos. ¿Teme que puedan irse a otros países vecinos con una fiscalidad más ‘amable’?

Lo que usted plantea no es tema hoy en Chile. De hecho, una empresa española, Gas Natural Fenosa, acaba de anunciar que está dispuesta a desembolsar en torno a 3.300 millones de dólares [2.754 millones de euros] para adquirir el 100% de la empresa chilena del área energía CGE. Y como ésta ha habido otras compras de compañías locales por parte de extranjeras, lo que significa que hay interés por estar en el mercado chileno. Las decisiones de inversión no dependen únicamente de la carga impositiva; tanto o mucho más importante es el clima en el que se llevan a cabo y la calidad de las instituciones para asegurar la existencia de un trato justo. Chile ha construido una reputación internacional de seriedad y responsabilidad que es altamente valorada por las empresas.

–¿Ha calculado su Gobierno el impacto que tendrá la reforma fiscal en la inversión extranjera?

Las opiniones que escuché de empresarios británicos y españoles durante mi visita de esta semana a Londres y Madrid me permiten descartar algún impacto. La posición de las empresas domiciliadas en los países con los cuales tenemos convenios tributarios no verán alterada el tratamiento que hoy reciben.

–Las previsiones más optimistas avanzan que Chile no crecerá este año más allá del 2%. ¿Cree que la reforma ayudará a reactivar la economía?

Se debe entender que la Reforma Tributaria fue diseñada de acuerdo a una gradualidad que implica que a partir de 2017 comienza a operar plenamente, con el alza definitiva de impuestos a las empresas. En la transición se incluyen los incentivos al ahorro y la inversión, de modo que estos contribuyan a adelantar decisiones de inversión que se verán beneficiadas con la reforma. En el sector inmobiliario, por ejemplo, la reforma aprobada incluye la aplicación de IVA a la venta de inmuebles nuevos que realicen las empresas inmobiliarias a partir de 2016. Esta entrada en vigencia posiblemente provoque el interés de adelantar la ejecución de algunos proyectos, lo que es bueno para la actividad económica y el empleo.

–¿Qué otras medidas de estímulo ha previsto su Gobierno?

Hemos impulsado dos agendas muy ambiciosas que están apuntando a los desafíos de mediano y largo plazo de nuestra economía, como son las agendas de Energía y de Productividad, Innovación y Crecimiento. También hemos presentado un proyecto de Ley de Presupuestos 2015 de carácter contracíclico, con un crecimiento de 27,5% del gasto en inversión –2.500 millones de dólares [1.950 millones de euros] el 1% del PIB– para apoyar la acción del sector privado y favorecer la actividad económica y el empleo. El gasto público inyectará 5.500 millones de dólares a la economía el próximo año. También estamos capitalizando las principales empresas públicas, Codelco y Banco Estado.

–¿Su Presupuesto para el año que viene eleva un 10% el gasto social. ¿Cómo van a financiarlo?

Se financiará con los ingresos fiscales, incluidos los que aportará la reforma tributaria durante el primer año de implementación, estimados en 2.300 millones de dólares. También recurre a financiamiento adicional, compatible con las normas de endeudamiento que establece el mismo proyecto.

–Ahora que China está mostrando síntomas de desaceleración, ¿cree que Chile está preparado para una reducción de la demanda de cobre a medio plazo?

Chile debe prepararse para los cambios estructurales que están ocurriendo en la economía mundial. Tenemos claro que es poco probable que a mediano plazo observemos los altos precios del cobre de los últimos años, por lo que el desafío es diversificar nuestra canasta productiva y exportadora, junto con mejorar día a día nuestra competitividad.