Presidente de la CMF informa a Ministro de Hacienda que Chile fue aceptado por la IOSCO como signatario del memorándum multilateral

La cartera liderada por Felipe Larraín contribuyó en este esfuerzo solicitando el 5 de julio de este año al CDE un informe en derecho, el que finalmente respaldó la posición de que la CMF tiene las atribuciones suficientes para compartir de manera efectiva y oportuna con las autoridades extranjeras toda la información relevante. 

El Presidente de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), Joaquín Cortez, se reunió hoy con el Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, para informarle que Chile fue aceptado por la Organización Internacional de Comisiones de Valores (IOSCO por sus siglas en inglés) como signatario del Memorándum Multilateral de Entendimiento Sobre Cooperación e Intercambio de Información (IOSCO MMoU).

El Ministro de Hacienda felicitó al Presidente de la Comisión por este importante logro, luego que la Superintendencia de Valores y Seguros (antecesora de la CMF) comenzara este esfuerzo el año 2004.

“Esto constituye un reconocimiento internacional al trabajo de las autoridades financieras y muestra que estamos avanzando por la senda correcta. Este importante logro contribuirá, sin duda, a una mayor integración internacional de nuestros mercados financieros y a disminuir el costo de capital de las empresas chilenas, con el consecuente impacto positivo en el empleo y en la actividad”, destacó el Ministro Larraín. 

IOSCO es un organismo internacional que reúne a la casi totalidad de las autoridades reguladoras y supervisoras de los mercados de valores del mundo, y es considerado como referencia en cuanto al establecimiento de estándares y cooperación internacional para dichos mercados.

El Memorándum IOSCO MMoU es el principal instrumento internacional para la cooperación transfronteriza en el ámbito de los mercados de valores. Fue establecido en el año 2002, atendida la creciente actividad internacional en los mercados de valores y derivados, y la consiguiente necesidad de cooperación y consulta mutua entre los miembros de IOSCO. De esta manera, busca asegurar la aplicación y el efectivo cumplimiento de la legislación sobre valores de cada país, entregando a los supervisores de valores una herramienta para combatir las conductas que debilitan los mercados globales y la confianza de los inversionistas.  

Adicionalmente, la firma del IOSCO MMoU se considera en distintas evaluaciones, tales como las del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial y del FSB (Financial Stability Board), entre otros. 

Para convertirse en signatario de este instrumento, la CMF tuvo que demostrar que era legalmente capaz de otorgar asistencia y compartir información, tanto pública como reservada, con reguladores extranjeros. El Ministerio de Hacienda contribuyó en este esfuerzo solicitando el 5 de julio de este año al Consejo de Defensa del Estado (CDE) un informe en derecho, el que finalmente respaldó la posición de que la CMF tiene las atribuciones suficientes para compartir de manera efectiva y oportuna con las autoridades extranjeras toda la información relevante. Este informe fue fundamental para que la CMF alcanzara este importante logro.

La SVS postuló a suscribir el MMoU en 2004, oportunidad en que IOSCO estimó que Chile no contaba con atribuciones legales suficientes para acceder a registros de operaciones bancarias y compartir dicha información con reguladores de otras jurisdicciones. Esta materia finalmente fue abordada a través del proyecto de ley de Comisión de Valores y Seguros, que ingresó a tramitación legislativa en 2013 y que se tradujo en la aprobación de la Ley N° 21.000 de 2017, que crea la CMF.

El Ministro Larraín valoró positivamente este logro e indicó que va en línea con “la adopción de los más altos estándares internacionales que ha emprendido el Gobierno y en el cual uno de los hitos más relevantes es la reciente aprobación de la nueva Ley de Bancos”. 

El titular de la cartera puntualizó que continuarán trabajando en iniciativas que, al igual que esta, contribuyen a hacer de Chile un centro financiero de clase mundial.