La iniciativa contempla 5 líneas de trabajo y 50 tareas específicas para fortalecer las barreras de la economía chilena frente al blanqueo de fondos ilícitos, el financiamiento del terrorismo y el crimen organizado.
El Gobierno, a través de sus Subsecretarios de Hacienda, Julio Dittborn, y de Interior, Rodrigo Ubilla, lanzó este mediodía en La Moneda la “Estrategia Nacional para la Prevención y Combate al Lavado de Activos y al Financiamiento del Terrorismo”.
En la puesta en marcha del plan, también participó el Director de la Unidad de Análisis Financiero (UAF), Javier Cruz, organismo que actuó como secretaría técnica. La Estrategia Nacional Antilavado fue formalizada con la firma de un convenio marco de implementación, suscrito por las autoridades de los 20 organismos que, durante un año y medio, participaron en su diseño.
En la instancia, el Subsecretario Dittborn destacó que “esta Estrategia se levanta como una herramienta que busca salvaguardar y robustecer el activo reputacional de Chile, dando certeza a los inversionistas respecto de que en nuestro país sus activos están mejor protegidos contra los lavadores y el crimen organizado” Agregó que “somos un país que ha sabido dar garantías de seriedad y estabilidad suficientes para recibir inversión y para ser, de hecho, plataforma de inversiones al exterior”.
“Es así, que en momentos en que los principales organismos financieros internacionales y las economías más avanzadas están exigiendo con más fuerzas que todas las naciones que están integradas al sistema financiero mundial identifiquen, evalúen y entiendan sus riesgos frente a operaciones de lavado de activos y de financiamiento del terrorismo y que levanten barreras adecuadas para combatir ambos delitos, Chile ha dado un paso sustancial en esa dirección”, concluyó el Subsecretario Julio Dittborn.
A través de la creación de una Comisión Técnica Intersectorial se coordinarán los esfuerzos que las instituciones participantes, dependiendo de su ámbito de acción, desarrollan en prevención, detección o persecución penal del lavado de activos (LA) y el financiamiento del terrorismo (FT). Con ello se espera elevar las capacidades investigativas, facilitar a los organismos pertinentes accesos a amplias bases de datos con información relevante, desarrollar acciones preventivas y fortalecer la detección de operaciones de blanqueo de fondos ilícitos.
Según estimaciones del FMI, anualmente se lava el equivalente a entre el 2% y el 5% del PIB mundial. Chile no es la excepción: entre 2007 y el primer semestre de 2013 se han dictado en el país 54 sentencias condenatorias por lavado de activos, las que involucran a 108 personas. El narcotráfico es el principal delito base que ha originado las operaciones de blanqueo; sin embargo, también se han detectado casos de fraude al Fisco, malversación de caudales públicos y trata de personas.
LAS LÍNEAS DE ACCIÓN
Las cinco líneas de acción que contiene la estrategia son:
Organismos que suscribieron el Plan de Acción
El convenio que pone en marcha el Plan de Acción de la Estrategia Nacional Antilavado fue suscrito por el Contralor General, Ramiro Mendoza; el Fiscal Nacional, Sabas Chahuán; los subsecretarios del Interior, Rodrigo Ubilla, de Relaciones Exteriores, Alfonso Silva, y de Hacienda, Julio Dittborn; los superintendentes de Bancos e Instituciones Financieras, Raphael Bergoeing, de Valores y Seguros, Fernando Coloma, de Pensiones, Solange Berstein, de Casinos de Juego, Renato Hamel y de Seguridad Social, María José Zaldívar; los directores del Servicio Nacional de Aduanas, Rodolfo Álvarez y de Impuestos Internos (S), Alejandro Burr; el General Director de Carabineros, Gustavo González; el Director General de la Policía de Investigaciones, Marcos Vásquez; el Director de Seguridad y Operaciones Marítimas de Directemar, Capitán Iván Valenzuela; y el Director de la UAF, Javier Cruz.