Usted está navegando por una versión inactiva del sitio web, cuya información fue actualizada por última vez en julio de 2020, y que es ofrecida únicamente con propósitos de archivo. Visite hacienda.cl para consultar la información actual.


Jueves, junio 27 de 2013

Subsecretario Dittborn concluye participación en reunión Iberoamericana

El Subsecretario de Hacienda, Julio Dittborn, concluyó su participación la tarde ayer en la VI Reunión Iberoamericana de Ministros de Economía y Hacienda, la que se llevó a cabo en el Hotel Sheraton en la ciudad de Panamá.

Esta reunión, que es preparatoria de la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en Panamá los días 17 y 18 de octubre próximo, fue presidida por el Ministro de Economía y Finanzas de Panamá, Frank De Lima.

Durante la primera sesión de trabajo, el Subsecretario Dittborn junto a los Ministros de la región, analizaron y debatieron, principalmente, las políticas de Estados Unidos, Unión Europea y Japón frente a la crisis y los impactos sobre sus economías. También contribuyeron a la discusión altos representantes de organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Comisión Europea.

Posteriormente, las autoridades analizaron los impactos de la crisis económica sobre América Latina y las medidas compensatorias, contando con la participación de personeros de de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Corporación Andina de Fomento (CAF).

En la última sesión se trabajó en la revisión y aprobación de la Declaración de la VI Conferencia Iberoamericana de Ministros de Economía y Hacienda.

Al respecto, el Subsecretario Dittborn destacó el compromiso alcanzado en esta cumbre, señalando que “hemos acordado trabajar conjuntamente en construir un espacio regional integrado que nos permita hacer frente a los vaivenes  de la economía mundial”.

Finalmente, las autoridades concluyeron hacer los esfuerzos necesarios para que los Gobiernos de Iberoamérica se conviertan en catalizadores del crecimiento económico a través de políticas fiscales sostenibles, que potencien el ahorro interno e impulsen la inversión en capital productivo, tanto en infraestructura como en talento humano.