Tras conocerse los resultados de la encuesta Casen que revelaron una baja en la pobreza de 15,1% al 14,4%, y en la pobreza extrema de 3,7% al 2,8%, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, destacó la “muy buena noticia” y advirtió que las cifras “nos llaman a perseverar porque hemos ganado una batalla, pero no la guerra contra la pobreza”.
En este sentido, el secretario de Estado comentó que “terminar con la extrema pobreza antes del fin de este mandato es uno de los más sentidos objetivos del Gobierno del Presidente Piñera, por lo que debemos seguir trabajando intensamente, pero estamos reconfortados de saber que vamos en línea con ese objetivo”.
El jefe de las finanzas públicas destacó que “el crecimiento del país y la generación de empleos son el mejor antídoto contra la pobreza. Por ello, el desafío es seguir creciendo, generando empleos y mejorando los salarios; eso es parte de nuestro desafío”.
Al evaluar los resultados, el ministro Larraín explicó que dos hechos negativos incidieron en esta encuesta: “El terremoto, que aumentó la pobreza en alrededor de 3 puntos, y el alza en el precio de los alimentos entre 2009 y 2011”; sin embargo, ello fue contrarrestado por “la creación de 700 mil nuevos empleos, mejores salarios y el crecimiento económico”, además de las políticas sociales implementadas por el gobierno “que han permitido esta disminución de la pobreza”.