El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, afirmó que Chile no sólo necesita mayor crecimiento económico, para lo cual es clave aumentar la inversión y la productividad. “Para ser desarrollados al necesitamos mayores grados de convivencia, integración y participación y eso pasa por más equidad”, precisó el secretario de Estado, al intervenir junto al ministro del Interior, Jorge Burgos, en el seminario de Icare “La política y la economía en perspectiva”.
Valdés enfatizó que el crecimiento “no está garantizado, hay que trabajar cada día por él. Y más aún, si no hay crecimiento cuesta pensar en una economía que de verdad dé oportunidades para todos y que sea equitativa”. Añadió que hay creciente evidencia en el mundo que los países equitativos crecen más. “Por eso quiero ser bien claro no estoy de acuerdo cuando algunos plantean que para crecer hay que olvidarse de las reformas. Hay que avanzar en ellas, con cuidado, de manera equilibrada, dialogando, haciéndonos cargo de distintas complejidades que tienen, y a un ritmo que sea responsable”, aseguró.
Como ejemplos de lo anterior, citó el proyecto que moderniza las relaciones laborales donde “estamos tratando de enmarcar ese debate de vuelta en las ideas matrices” y la reforma tributaria donde ratificó su compromiso “con un proceso de impecable” donde exista diálogo y se pueda “propender a la simplicidad del sistema”. Pero calificó como “poco serio plantear explícita o implícitamente bajar los impuestos o flexibilizar las normas anti-elusión”.
Escenario económico
Respecto del escenario económico general, el ministro dijo que la economía se ha desacelerado de manera importante desde hace un par de años y en forma más intensa de lo previsto. Sobre las razones, aludió a que las condiciones externas para el mundo emergente (principalmente, precios de las materias primas y condiciones financieras) han cambiado. Ello ha llevado a una “desaceleración generalizada en países emergentes, no sólo en Chile.
“Negar esto es un problema porque nos pone fuera de contexto, negar otras causas de desaceleración también es un problema. Porque más allá de los factores cíclicos externos, también hay debilidades estructurales en nuestra economía”, comentó, citando entre ellas los déficits en materia de productividad, energía, capital humano e innovación.
Añadió que el clima de confianza también es muy importante para la economía. “Un empresario, sea pequeño, mediano, grande, arriesga su capital cuando invierte y necesita proyectar escenarios futuros cuando toma esa decisión. Los distintos escándalos que hemos conocido en los últimos meses por acciones del mundo empresarial o el mundo político, sin duda han mermado la confianza. Y aunque siempre ha sido difícil asignar estas razones con precisión, es imposible no concluir que los problemas políticos que estamos viendo están teniendo efectos económicos”, sostuvo. Por ello estimó muy relevante perseverar en la Agenda de Transparencia y Probidad. “La mejor política, los mejores mercados, tienen que ser prioridad”, acotó.
El titular de Hacienda agregó que “la discusión de reformas que hemos propuesto en el Gobierno ha generado grados de ansiedad. Es bien sabido que los procesos de cambio son difíciles y pueden afectar la confianza. Creo yo que son costos de corto plazo, que vale la pena pagar”. Precisó que por ello el gobierno está enfocado en “diseñar e implementar las reformas con diálogo, con atención a los detalles, de manera de minimizar estos efectos”.
Luego abordó el conjunto de factores que estimó claves para que Chile haya avanzado por la senda del crecimiento, los que dijo también son fundamentales para lograr una mayor inclusión. Sostuvo que para ello es importante tener una economía abierta, integrada al mundo, con instituciones fuertes y con finanzas públicas sanas.
“Tenemos que tener un sector privado que tiene un rol crucial en la asignación de recursos, insustituible en casi todos los mercados, en que la propiedad privada es un derecho fundamental. Y un Estado que promueve mercados competitivos y bien regulados, que provee bienes públicos de calidad y que tiene un rol inclaudicable en buscar equidad, promover derechos y, también, deberes”, precisó.
Al ser consultado al respecto en el marco del proceso constituyente, ahondó señalando que “no concibo una economía moderna, de mercado, sin derechos de propiedad claros, estables. Es algo sustancial a lo que es una economía moderna. El proceso de reforma constitucional pondrá derechos adicionales en la constitución, habrá discusiones que se podrán hacer en su momento”. Añadió que “tenemos que tener seguridad que los chilenos no van a arriesgar cuestiones básicas, que son justamente en que para que funcione una economía, requerimos derechos de propiedad claros”.
Políticas macroeconómicas y productividad
Más adelante en su intervención, el ministro Valdés explicó que para enfrentar el ciclo de desaceleración de la economía el Banco Central ha mantenido una política monetaria estimulativa, mientras que por su parte el gasto fiscal está teniendo una expansión significativa, con un fuerte componente de inversión pública. Esto último, dijo, implica que este año el déficit cíclicamente ajustado del gobierno aumentará respecto del año 2014.
Destacó gracias a que nuestra economía hizo un ajuste mayor tanto en lo cambiario como en su cuenta corriente, “hoy por hoy están dadas las condiciones macroeconómicas para crecer”. Precisó que la política macro “está haciendo todo lo que es posible de hacer”, por lo que en 2016 se debe iniciar un proceso de consolidación que será “calibrado con cuidado teniendo en consideración el ciclo económico y los objetivos fiscales de mediano plazo”.
La autoridad sostuvo que hoy la tarea prioritaria es trabajar en ampliar nuestra capacidad de crecimiento. En este ámbito, comentó que a Chile le ocurre algo que sucede en todo el mundo, donde las perspectivas de un menor crecimiento potencial se han traducido en una sistemática revisión a la baja en las perspectivas de crecimiento de mediano plazo.
Añadió que “esta no es una tarea fácil y tenemos que ser realistas”, ya que cuando los países tienen niveles de ingresos como los que Chile exhibe hoy, las reformas necesarias para incrementar la productividad no son obvias.
Por una parte, afirmó que se requiere más inversión privada y detalló que “con el cambio de precios relativo, con el ajuste macro que hemos hecho, están dadas las condiciones para que la inversión en otros sectores (no mineros) de verdad aumente”. Destacó además que “la productividad es lo único que genera crecimiento en el largo plazo” y por eso valoró que el mundo empresarial esté trabajando en ese tema. Anunció que próximamente el gobierno conformará una Comisión de Productividad, “que tendrá como misión realizar estudios y proponer políticas públicas de alto impacto que incidan en nuestro crecimiento”. Afirmó que “es una muy buena señal que gobierno y sector privado estén pensando lo mismo, y creo que podemos trabajar juntos en esto”.
Valdés añadió que el gobierno impulsará aquellas iniciativas que ayuden al crecimiento, donde los temas más relevantes tienen que ver con energía, un mejor funcionamiento de mercados, con confianza, innovación, acceso a financiamiento y un mejor funcionamiento del aparato público.
En este ámbito citó la necesidad de seguir coordinando la acción de distintos órganos del Estado para destrabar la materialización de proyectos. “Tenemos el convencimiento que el Estado puede y debe ser más ágil a la hora de aprobar inversiones que cumplan con la normativa”, dijo. Anunció que se iniciaron conversaciones con distintos actores “de manera de tener un nuevo levantamiento de medidas que faciliten la concreción de la inversión privada”.
Insistió en que mejorar el crecimiento y la equidad es tarea de largo aliento. “Esto es lo que tengo en mente cuando escucho a algunos proponer medidas, déjenme decir, facilistas, para impulsar el crecimiento. Hay que hacer un trabajo cuidadoso. En esto no hay atajos ni recetas mágicas. No es algo que un ministro de Hacienda por sí sólo, que un sector empresarial, una región o un grupo de trabajadores pueda hacer de manera aislada. Si no trabajamos todos juntos, si seguimos arrojándole la carga al otro, nos vamos a demorar más en avanzar”, enfatizó.
Junto con llamado al dialogo y a la búsqueda de acuerdos, también pidió mayor responsabilidad. “Tenemos recursos que son escasos, y que debemos cuidar bien. El dinero de todos los chilenos es para todos los chilenos, no para grupos de presión que están preocupados sólo de cuidar sus intereses o defender sus privilegios”, concluyó.