“El potente, macizo y sólida discurso que ha hecho hoy la Presidenta Bachelet nos invita avanzar en enfrentar las distintas desigualdades que hoy existen en Chile para alcanzar un desarrollo inclusivo. Un desarrollo inclusivo quiere decir que Chile vuelva a retomar una senda de crecimiento, pero que ese crecimiento ingrese a los hogares de todos los chilenas y chilenos”, aseguró el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, tras asistir esta mañana a la primera cuenta pública de la Mandataria en el Congreso.
El secretario de Estado destacó que a pesar del reciente terremoto en el norte y el incendio en Valparaíso, la Presidente reiteró “en este histórico discurso” sus compromisos reflejados en el programa de gobierno y el cumplimiento de las 56 medidas de los primeros 100 días. Subrayó las tres reformas estructurales comprometidas: nueva Constitución, Reforma a la Educación y Reforma Tributaria.
Respecto a esta última, aseguró que se trata de una “reforma tributaria de verdad y que, como desde el primer día hemos dicho, está concentrada en el 10% de más altos ingresos y no afecta a la clase media y protege a la pequeña empresa”.
El titular de Hacienda valoró el “tremendo respaldo” del proyecto tras su aprobación en la Cámara de Diputados y agregó que “hemos llevado un diálogo con flexibilidad, precisando donde ha sido necesario precisar; perfeccionado donde se ha necesitado perfeccionar y avanzado con cambios acotados y compensados; es decir, no está en juego que vamos a recaudar US$ 8.200 millones”.
El jefe de las finanzas públicas destacó: “Hoy la Presidenta en su discurso lo decía a todo el país, que será una realidad que en 2014 vamos a tener implementada una Reforma Tributaria que es tan importante para ordenar nuestras cuentas fiscales, pero también para financiar en forma responsable las medidas anunciadas hoy y que tienen que ver con las distintas áreas, especialmente en educación”.
Respecto a la próxima discusión del proyecto en el Senado, Alberto Arenas dijo que “no va a pasar otra cosa que lo que ocurre en toda democracia, en que va a haber un diálogo profundo, con flexibilidad y disposición a efectivamente enfrentar y perfeccionar nuestro proyecto de ley, manteniendo aquello que nosotros hemos dicho que es parte del corazón de nuestra reforma: recaudar US$ 8.200 millones, mejorar la distribución del ingreso y tener implementado un nuevo impuesto a la renta en Chile”.