El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, destacó esta mañana el aporte de las variables macroeconómicas en el impulso del clima de negocios del país, que actualmente sitúan a Chile en el lugar 37 del ranking del Doing Business del Banco Mundial y en la primera posición en Latinoamérica.
En el marco de su participación en la Charla de Alta Dirección Grupo Banco Mundial: “Chile y la Creación de un Clima de Inversiones de Primera Clase a Nivel Mundial”, organizado por la Escuela de Administración de la Universidad Católica, el secretario de Estado manifestó que “estamos mejor que cualquier país de Latinoamérica, pero nunca nos debemos dormir en los laureles y en ese sentido, lo que debemos hacer también es analizar cómo podemos mejorar en este indicador”.
El jefe de las finanzas públicas sostuvo que si bien se deben tomar en cuenta las variables microeconómicas en el clima de negocios, destacó el aporte de la macroeconomía en los últimos años. En este sentido, mencionó el hecho de que el año pasado, la inversión en capital fijo alcanzó su mayor nivel desde 1960. Se refirió también a la recuperación, tanto de la Inversión Extranjera Directa, como de la posición fiscal estructural y de los fondos soberanos.
Según Felipe Larraín, otro punto a favor del clima de negocios, fue la colocación del último bono soberano en dólares a 10 años, que logró una tasa de 2,379% la más baja que se tenga registro para un país emergente.
“Las variables macroeconómicas, como una política fiscal responsable, un gasto público que crezca en forma moderada, un déficit fiscal contenido y una regla fiscal que enfoque al largo plazo una meta en términos de balance estructural, son todas cosas que ayudan al clima de negocios”, aseguró el secretario de Estado.
Asimismo, agregó que “una inflación baja y tener la mejor clasificación crediticia del mundo emergente, hecho por agencias internacionales, nos permite tener a Chile el costo de capital más bajo de todo el mundo emergente. Esto es sin duda una ventaja competitiva de nuestro país”.