El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, junto a su par de Educación, Harald Beyer, acompañaron esta mañana al Presidente Sebastián Piñera en la ceremonia de promulgación de la Ley que Perfecciona la Legislación Tributaria y Financia la Reforma Educacional, incrementando la recaudación en cerca de US$ 1.000 millones anuales para destinarlos a mejoras en la calidad de la educación preescolar, escolar y superior, principalmente de los sectores más vulnerables del país.
El proyecto considera fundamentalmente un aumento del impuesto de primera categoría a 20%; disminución del impuesto de timbres y estampillas a 0,4%; un crédito tributario por gastos educacionales de las familias de clase media; la constitución de un fondo permanente de US$ 4 mil millones para educación; reducción del impuesto a la renta de las personas con foco en los tramos inferiores; reliquidación de impuestos de segunda categoría; disminución del impuesto al software; y medidas anti-elusión, entre otros.
“Este es un momento importante para Chile. Los países avanzan cuando es posible alcanzar acuerdos que vayan en beneficio de sus habitantes y eso es lo que hace esta reforma tributaria, que constituye un gran aporte para la educación de las chilenas y chilenos. Si queremos alcanzar el desarrollo y derrotar la pobreza tenemos que mejorar la educación y hoy hemos dado un paso concreto en esa dirección”, sostuvo el Ministro de Hacienda.